Monday, May 14, 2007

Un mes después


Rodeada de paredes extrañas y mientras mis compañeros devoraban lo poco que les había traído para celebrar mi cumpleaños, me anunciaron algo que iba a cambiar muchas cosas. Algo bueno, algo por lo que felicitarme… ¿o no? Esa pregunta me hice durante las semanas que pasaron hasta que el cambio se hizo realidad… algunas dudas no se fueron y me di cuenta de que iba a perder más de lo que pensaba. Ahora ya he tenido varios días para descubrir qué echaré de menos y todo lo bueno que tiene un nuevo horario, un nuevo trabajo y, sobre todo, mucho, mucho más tiempo para mí. De momento, estoy contenta, ilusionada, feliz de que ALGO haya pasado tras muchos meses iguales con pocas horas para pasarlas con quienes quería. Pero aún sigo teniendo miedo. A lo desconocido que empieza a ser conocido muy poco a poco.





El mismo día en que me vi pequñita sentada en un despacho, celebré mi cumpleaños en ese lugar oscuro que servía alcohol de dudoso origen… (por las consecuencias al día siguiente)