Berlín. San Sebastián. Edimburgo. Niza. Ahí van cuatro de los posibles viajes que haga este verano. Es lo típico, que se planea, te haces ilusiones, te ves en la playa rodeada de gente pija (caso de Niza), escuchando a Bob Dylan en la playa rodeada de guiris (como sueña Bea, por los guiris, no por el concierto), intentando ver al monstruo del Lago Ness (mi hermana TIENE que hacer de guía conmigo si al final la visito, después de la paliza que me metió a mí el año pasado) o recordando viejos tiempos con Rosita (qué ganas, qué ganas!!!) Como objetivamente es bastante posible que alguno de los viajes caiga (todo sería… sería genial, GENIAL) si me pongo a ello, me he puesto súper feliz esta tarde. La verdad es que para ponerme feliz es suficiente con imaginar estas cosillas. Lo bueno es que me he propuesto hacerlas…
Como estoy de muy buen humor y hace mucho que no escribo, sigo un ratillo. Es que en realidad hoy quería hablar del último libro de Vargas Llosa (Travesuras de la niña mala), que me compré con la intuición de que me iba a gustar, aunque cuando los escritores se hacen mayores ya empiezo a desconfiar porque a muchos se les acaba un poquito la imaginación y van más a vender. Me ha gustado muchísimo. Me ha encantado. Porque la historia de amor es preciosa y tiene escenas per-fec-tas, y lo cuenta tan bien que sientes lo que siente él, y ella, y los dos, y les comprendes aunque se equivoquen y hagan tonterías. Y porque el libro, aparte, es bastante más que una historia de amor. Cuenta muchas cosas. Creo que cosas que sólo se pueden explicar bien, precisamente, si ya has escrito mucho, y vivido mucho, como él. Lima. París. Londres. Tokio. Madrid...
2 comments:
VIVA LIMA, VIVA VARGAS LLOSA!!! ahora a leer "Conversacion en la Catedral"... la verdadera obra maestra de Varguitas....
¡AH Y VIVA EL PERÚ!
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